Imagina ahora que dedicas una hora a labar y encerar mi vespa.
Y cuando te doy un regalo. ¿Cómo te sentirías?
Probablemente valores el regalo.
Sentirás que te lo has ganado.
Así es como queremos que sean nuestras relaciones con las mujeres.
queremos mostrar nuestro interés en ella de modo que podamos escalar pero al mismo tiempo queremos que hagan el esfuerzo en la interacción con nosotros de modo que valoren nuestro interés.
El esfuerzo emparejado con la recompensa adecuada es la base de una escalada efectiva.
Entonces, ¿cuál es su esfuerzo? Defino esfuerzo como poner su ser único, individual en la interacción contigo.
Si muestras tu interés basándose en la individualidad que se ha esforzado en mostrar, entonces ella valorará tu interés.
Puedes escalar en la interacción hacia un resultado sexual o
romántico.
Aquí van unos ejemplos, los dos buenos y malos.
Ésto ha sido DEMASIADA recompensa para la cantidad de individualidad revelada.
Hay una desconexión. Ella sentirá que no es posible que la estés apreciando.
Sentirá que no ha dicho nada para merecer tu adulación.
Eso le hace sentirse incómoda y sospechará de tu interés.
Intentémoslo de nuevo.
No ha habido recompensa después de que haya revelado algo interesante y específico sobre ella misma.
Pasmos por encima y vamos hacia algo desconectado.
Las mujeres tienen un instinto para las reglas de la escalda.
Si siente que no puedes llevar la interacción a algún sitio interesante se aburrirá y se irá.
Es la cantidad justa de interés basada en la individualidad que te ha revelado.
Date cuenta de que puedes avanzar en la relación (en este caso yendo a un sitio más íntimo)
Así es como escalas.
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