Capítulo 4:
Usar las afirmaciones es realmente simple. La mejor manera de hacerlo es conseguir una grabadora.
No vayas a comprarte lo último en grabadoras, sólo necesitas ser capaz de grabar tu propia voz.
Escribe cada una de estas afirmaciones en un papel y llévatelo a algún lugar dónde puedas actuar sin interrupciones.
No querrás que algún compañero entre en tu habitación mientras repites estas cosas, ¿verdad? Puede pensar que eres un poco rarito.
Y mientras estés haciendo estas cosas, ¡¡NO LE CUENTES A NADIE QUÉ ESTÁS HACIENDO!! Sólo permíteles preguntarse por qué de repente acuden todas esas chicas a ti.
Adelante. Lo que tienes que hacer es encender la grabadora y repetir cada afirmación por lo menos 10 veces.
Habla lento e intenta poner un poco de entusiasmo en ello, aunque realmente no importa.
No obstante, eso hace la cinta más agradable de escuchar. Una vez que hayas terminado, todo lo que tienes que hacer es escuchar la cinta (preferiblemente con cascos) siempre que tengas tiempo.
Tu cinta debería durar sobre 20 minutos o media hora y deberías escucharla dos veces cada día durante la primera semana.
Puedes hacerlo antes de irte a dormir, cuando te despiertas por las mañanas, mientras ordenas prendas para hacer la colada, etc.
NO debes prestar atención a lo que la cinta dice a nivel consciente. Trascurrida la primera semana, notarás repentinos cambios en tu comportamiento y respuestas hacia las mujeres.
Te encontrarás diciendo y haciendo cosas que nunca antes habías imaginado decir o hacer. Hagas lo que hagas, nunca “intentes” apoyar estas acciones forzando tu comportamiento.
Es la única forma en que este método puede fallar; está trucado para actuar automáticamente, así que permíteselo, ¿lo has oído?
Ahora, debo decir que alguno de vosotros preferirá no usar una grabadora, en lugar de eso, puede ser mejor repetir las afirmaciones para uno mismo.
Está bien, siempre que las digáis bien claras. No tenéis que gritarlas, por supuesto; de hecho yo recomiendo hablar en un tono bajo y calmado si tomáis este curso de acción.
Pero si estamos con la variación de hablarte a ti mismo, ¡¡hay una forma de combinar ambos métodos para conseguir grandes, grandísimos resultados!!
Ten tu cinta preparada y saca el papel con la lista de afirmaciones. Cuando comiences a escuchar la cinta, lee alto y claro cada una de las afirmaciones, pero empieza por la segunda.
De esta manera, la afirmación que oirás en la cinta será siempre distinta a la que estás leyendo.
Ahora… ¿por qué esto funciona tan bien? Simplemente, pasa por encima de la capacidad consciente de tu mente para mantener la pista y hace que las afirmaciones lleguen a tu subconsciente mucho más rápido.
Esto es conocido en hipnosis cómo doble inducción al trance,
¡¡y funciona increíblemente bien!!
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