El problema de estudiar mucho sin utilizar la información en el campo es que se vuelve más y más distorsionada con cada encuentro con la información.
Cuando te encuentras con una idea en un DVD o en un libro, a menudo te imaginarás a ti mismo en una hipotética situación similar a la que se describe.
Entonces tus emociones, esperanzas, sueños y temores llenarán los espacios en blanco que no fueron descritos por el autor.
Esta pequeña manera de soñar despierto es una gran manera de empezar a trabajar en la interiorización de una idea, pero por lo general tiene poco que ver con cómo ocurrirían las cosas en la realidad.
En un mundo perfecto, el segundo EI sería una situación real, y tendrías la oportunidad de formarte una interpretación más realista de la idea sin tus emociones llenando tanto los espacios en blanco.
Pero si no tienes experiencia en el mundo real con la idea dentro los 5-10 primeros EIs, tus fantasías poco realistas acerca de la idea comienzan a cristalizar en algo que no funcionaría tan bien en la vida real.
Finalmente, la información se ha vuelto tan distorsionada que en realidad hace que empieces a ir hacia atrás. Así es, es posible ir hacia atrás en esto.
Cada día, cada momento, o estás moviéndote hacia atrás o estás moviéndote hacia delante. Las ideas que estudias son como leche pudriéndose en la nevera.
Si no las sacas a la mesa en una semana o dos, se empiezan a estropear. Después empiezan a apestar toda tu nevera. Ahí es cuando realmente empiezas a moverte hacia atrás.
Así que ahí lo tienes. Ahí están el problema de la sobrecarga y el problema de la distorsión. Cuando comienzan a interactuar tienes la receta para un jinete del teclado.
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