Te estoy dando dos reglas. No doscientas. ¡¡DOS!!.
¿A quien le importa lo que piensa ella?
y
vos sos la persona más importante en la relación.
Al principio, suenan como dos reglas
muy estupidas.
Pero cada vez que las escuchas, empiezan a tener más y más sentido
para vos.
Si a vos no te importa lo que piensa ella, tus miedos desaparecen. Y si
realmente crees que sos la persona más importante de la relación, empezas a tomar
responsabilidad por tu propia vida.
Te fuerza a ser fuerte, decisivo, honesto y congruente.
Lo que decidas es cosa tuya. No te estoy diciendo que seas yo, te estoy diciendo que vos
seas vos.
No estas siendo rudo con ella por no interesarte en lo que dice.
Hay una careta sin
sentido que la gente se pone, y no sabes si están jugando juegos o jodiendo con vos.
Estas dos reglas son un escudo para toda esa mierda. Estas reglas realmente tienen una
forma de cortar a través de toda la boludes.
Los hombres son libres hasta que se casan, y las mujeres son libres cuando se casan.
Una vez estaba saliendo con una chica que me dijo, “O nos casamos, o no me voy a ir a
la cama mas con vos”.
Y yo me sentí mal.
Ahí estaba esa mujer diciéndome que me ama,
que quiere pasar el resto de su vida conmigo.
Ella quería todo de mí, y si yo no le podía
dar eso, ella me iba a dejar para siempre.
Un montón de tipos quedaron atascados de esa
manera. Cayeron por esa frase.
¿Pero que me estaba diciendo realmente esta mujer?
En
realidad estaba diciendo, “¡Hace lo que yo digo, cachorrito!
Casate conmigo así puedo
usar el sexo para controlarte por el resto de tu vida”.
Ahora, si tuvieras un harem de 5 o 6
mujeres, y una mujer te dijera eso ¿Qué dirías? “Chau!”
Un montón de tipos tienen miedo de mirar a las mujeres que los atraen.
Tienen miedo de
que ella se pudiera enojar. Si estoy mirando una película porno, si se me canta, me podría
empezar a pajear.
¿Me importa lo que piensa la TV? No me importa lo que piensa nadie.
Punto.
Cuando digo “¿A quien le importa?”, es porque vivo de esa manera. Si ella no
puede manejar el que yo la mire ¿para qué carajos la quiero?
Cuando querés mariscos, y
vas a un restaurante y no tienen mariscos en el menú, te vas.
Es la misma cosa. Si una
perra no tiene lo que yo quiero en su menú, no trato de acomodarme a ella.
¡No me
importa!
Mandame al carajo cuando sea. Probame.
No importa.
Si no te importa, podes dejarte ir y
pasarla bien. ¿Qué tengo que perder si ellas se “ofenden”?
Solamente puedo ganar.
Cuando tratas de levantarte una chica, no importa lo que hagas, SOLAMENTE PODES
GANAR.
No podes tener menos que cero. Si te importa lo que ellas piensan de vos,
entonces no podes ir más allá.
Y si no podes ser honesto y sincero acerca de lo que vos
querés, no podes tener éxito con las mujeres.
Todo este libro es solamente una forma de
explicar las dos reglas. Siempre vuelve a las dos reglas básicas.
Si podes integrar esas
dos reglas en tu vida, quedas libre de la Prisión del Miedo.
Yo soy la persona más importante en mis relaciones, mis reglas son la regla.
No vivo por tus reglas, vivo por mis reglas.
Si una mujer empieza a decirme todas estas reglas acerca
de que tan lejos puede ir ella en la primera “cita” y la segunda y así, yo podría mirarla y
decir, “¿Puedo tener una copia de todas esas reglas ahora por favor?
Porque me gustaría
tener una relación espontánea, y si tenés todas esas reglas que no puedo tocarte hasta
que haya pasado cierto periodo de tiempo, o algo igualmente ridículo, entonces necesito
saber cuales son ahora, no en seis meses.
Y ya que hablamos de esto, y nos estamos
dando nuestras reglas, yo tengo algunas también”. No juegues juegos con esas mujeres.
Una de las cosas que las mujeres siempre me dijeron que les gusta de mi es que yo las
escucho.
Mira, la mayoría de los tipos piensan que escuchan, pero no están escuchando.
Los tipos siempre están interrumpiéndolas dándoles consejos y ayuda, los tipos siempre
están poniéndose en su camino.
Un montón de hombres tratan de tomar responsabilidad
por los problemas de las mujeres, y adivina que: Eso es imposible.
¿A quien le importa lo que ellas digan?
Podes escucharlas, pero nunca te dejes atrapar
por lo que sea que te estén diciendo. Simplemente escuchalas.
Ellas quieren que las
escuches, eso es todo. ¡Esas son muy buenas noticias!
A partir de ahora sos libre de
tener que resolver todos los problemitas estupidos que las están volviendo locas. No te
enrosques en todos sus dramitas.
Una de las razones por las que ellas están buscando
un hombre es porque los hombres se supone que sean más estables emocionalmente
que las mujeres.
Los hombres son mucho más lógicos (a veces) y menos emocionales de
lo que son las mujeres. Se supone que seamos fuertes para ellas.
Ellas no quieren un
mariquita, quieren un hombre fuerte.
No un macho, no un pelotudo, ellas quieren un tipo
fuerte. ¿Cómo te haces a vos mismo fuerte?
Desinteresándote por lo que ellas piensan.
Sabiendo que no importa lo que pase, la persona más importante a la que tenés que
cuidar sos vos.
Cuando empezas a tener éxito real con las mujeres, algunas de ellas van a tratar de
fastidiarte por eso.
Pero, si realmente no te importa lo que ellas dicen, entonces estas
libre de toda esa mierda.
Si una minita trata de fastidiarte por lo que sea, lo peor que
podes hacer es ponerte a la defensiva y tratar de convencerla de tu sinceridad.
Me
acuerdo de esta chica que empezó a hablar acerca de mi reputación de “jugador”. Yo no
discutí, le dije que todas las cosas que la gente dice de mi son ciertas. ¿Qué puede decir
ella? Quedo trabada.
No voy a discutir con ella.
En esta cultura, gastamos demasiado
tiempo pensando y discutiendo cuando podríamos estar garchando. La persona mas
importante en la relación sos vos, pero igual tenés que preguntarles a las mujeres cuales
son sus reglas en una relación.
Mejor averiguas cuales son sus reglas ahora, porque las
mujeres tienen algunas reglas extrañas y limitantes. Y no te metas en un gran debate
acerca de las reglas tampoco.
Es a mi manera o de ninguna manera. ¿A quien le importa
lo que piensen ellas? Si ella no me quiere, quizás conoce a alguien que podría quererme
y nos puede presentar. ¿Ella no puede coger hasta la 7 “cita”? ¡Esta bien! “¿Quizás
conoces a alguien que sea un poquito menos rígida?”.
Yo les digo a las mujeres que tengo una regla mayor. “A mi manera o de ninguna manera”.
Sin resentimientos, esa es la forma en la que me gusta. “Si encontras un tipo que se
ajuste mejor a tus necesidades, anda detrás de eso.
Porque mis reglas no son
negociables. Yo sé que es lo mejor para mí y se lo que quiero en una mujer. Y si no estoy
siendo razonable, sabes que si me dejas, al menos vas a poder decirle a la gente que yo
no soy un hombre razonable.
Hasta te voy a dar una carta de recomendación diciendo
que no soy un hombre razonable”.
A mi no me importa lo que nadie piensa se de mi. Amo la forma en que soy.
Me gusto a mi
mismo.
Me fui transformando en el tipo de persona que me gusta, y si fuera una mujer, me
gustaría mucho estar conmigo.
Tenés que aprender a hacer tus reglas y quedarte fijo con
ellas no importa lo que pase. Si les das unos centímetros, se van a tomar un kilómetro.
Sé
implacable. No pongas excusas, no te vuelvas vago y no hagas excepciones.
Una ves salí con una chica que me dije que ella únicamente deja que sus novios se la
garchen 12 veces al año. ¡La verdad me lo dijo muy seria!
Dijo que si un tipo es
inteligente, se la va a garchar una vez al mes, porque si usa sus 12 garches de una, ¡va a
tener que esperar hasta el próximo año para tener sexo otra vez!
Así que me la cogí 4
veces al día durante 3 días y le dije adiós. Me pregunto, “¿Dónde vas?”
Le dije que ya que
ya había usado todos mis doce tickets, no tenía sentido quedarme con ella.
Le dije que
estaba OK, que yo respetaba sus reglas y no le iba a pedir garchar otra vez, y después de
todo, realmente ¿ella esperaba que le rogara?
Termino persiguiéndome por los cinco años
siguientes. ¿Por qué?
Porque yo hago las reglas, no ellas. No me importa lo que piensan ellas.
No estoy metiéndome en relaciones para hacer
felices a las mujeres, yo hago lo que quiero en mis términos o es ¡Adiós! Y la paradoja es
que mi tipo de actitud las hace ir como locas por vos.
Ellas quieren un hombre fuerte, no quieren un mariquita.
Pensá por vos mismo. Te están probando y tratando de enroscarte
con sus deditos, y tan pronto como te pones vago, y tan pronto como empezas a hacer
excepciones a tus reglas, ellas pierden el respeto por vos.
La peor cosa que le podes decir a una mujer es “Yo también”.
Yo también se llama besar
el culo de donde yo vengo.
Nunca le beses el culo a una mujer.
Ustedes muchachos
entienden todo mal, dicho sea de paso. No es que los idiotas abusivos (jerks) están
quedándose con todas las mujeres y los tipos buenos no tienen ninguna.
Es que los
idiotas abusivos muestran confianza y los tipos buenos muestran debilidad. Pienso que un
buen tipo con confianza en si mismo puede tener todas las mujeres que necesita.
No
tenés que actuar como un idiota abusivo para tener mujeres. Es triste porque muchos
tipos creen eso.
Por supuesto, es discutible que algunas mujeres solo están satisfechas si
están con un tipo que se abusa de ellas pero ¿quien la querría a ella?
Nunca le digas a una mujer que una de sus amigas es mas linda que ella. Te digo que
seas honesto, no estupido.
Ella nunca se va a olvidar y te va a castigar por eso.
¿Y que
hay de la terrorífica pregunta “¿Estoy gorda?”
Decile la verdad,
“Linda, ¡no me siento
cómodo contestando esa pregunta!”.
Excelente material en serio
ResponderEliminarQue aprendo detalles nuevos jejeje